La Fonoaudiología y la Voz

Fga. Claudia Kegreiss

 

La Voz es identidad, es parte de nuestra personalidad, nos define y manifiesta.

Con nuestra voz expresamos emociones, conocimientos, interactuamos con el otro, exigimos, demandamos, liberamos, amamos.

Es el vehículo del habla, del lenguaje que expresa nuestros pensamientos y todo aquello que queremos comunicar.

El ser humano es el único que posee esta habilidad para comunicarse. Gracias a ello podrá informar, seducir,  enseñar, vender, entretener, animar, conducir, ordenar, festejar o cantar.

La voz de cada individuo es única.

Desde que nace y con el paso de los años se irá modificando por el crecimiento y por la acción natural de las hormonas. 

Las características de la voz, su tono, intensidad y timbre dependerán de la constitución física y anatómica derivada de la herencia. 

La voz puede modificarse por uso o el abuso que se hace de ella desde el nacimiento, de las debilidades y potencialidades naturales de cada individuo y de la manera que esa voz se adapte a los cambios producidos por enfermedades (resfríos, alergias, reflujo gástrico, etc.). La voz es particularmente sensible a las emociones de angustia, ira, frustración o dolor. Sufre un gran daño por el tabaco.

Es por esto que se dice que la voz de cada individuo en única.

 

Para producir la VOZ intervienen tres sistemas: RESPIRATORIO, RESONANCIAL  y FONATORIO.  Del uso equilibrado de estos tres sistemas dependerá la salud vocal, lo que redundará en la calidad vocal y en las posibilidades expresivas, ya sea de la voz hablada o cantada.

La voz hablada, herramienta fundamental para los profesionales de la voz tales como docentes, actores, locutores, conductores, vendedores, telemarketer, periodistas, debe ser entrenada, cuidada, fortalecida, a través de técnicas respiratorias, de emisión y colocación de acuerdo al uso que requiere.

La salud vocal parte de una emisión eufónica, esto significa de una producción vocal sin esfuerzo notable en ninguno de los tres niveles arriba enunciados.

Se dice que hablar debe ser tan sencillo como ver u oír.

 

La disfonía

La disfonía es una alteración del tono (agudo-grave), de la intensidad (alta-baja) o del timbre (soplado, velado, nazalizado, apretado) de la voz con causa aparente o no.

La aparición puede ser brusca o lenta. Si es brusca la causa puede ser infeccionsa, resfrios, (virósicos o bacterianos), enfriamientos, o irritante, causada por ácido del estómago que llega a la laringe, o por la inhalacion de gases tóxicos, nicotina, marihuana.

Si es paulatina debemos determinar los factores que influyeron para que la voz se modifique. El cansancio, dormir poco, la ingesta de determinados medicamentos, la acidez estomacal, trastornos psíquicos, reflujo Gastroesofágico, pueden ocasionar una irritación de la faringe y de la laringe y producir una hipotonía (debilidad) de las cuerdas vocales, con pérdida de volumen de voz, lo que genera un sobresfuerzo a nivel de éstas para mantener la voz en tono y volumen, pudiendo producir, nódulos, edemas, pólipos, hipertonía, hipotonía vocal, provocando cambios en la voz de manera permanente, o bien cansancio o fatiga vocal.

Si esta persiste por más de 15 días es el Médico Otorrinolaringólogo el que a través de la observación directa de las cuerdas vocales, debe diagnosticar y determinar si requiere tratamiento medico farmacológico, fonoaudiológico o quirúrgico.

La fonoadiología, de la cual se desprende la foniatría,  se ocupa de los trastornos de la comunicación humana, Habla, Lenguaje y Voz.

 

 

Señales que determinan una evaluación fonoaudiológica y Otorrinolaringológica:

• Molestia o cansancio al hablar.

• Carraspera o tos.

• Carraspera o tos al acostarse o después de comer.

• Sensación de cuerpo extraño o de globo en la garganta.

• Ardor, sequedad.

• Tensión o esfuerzo al hablar.

• Disminución de la voz al final del día.

• Disminución de la voz al comenzar el día.

• Imposibilidad de aumentar o disminuir el volumen de la voz.

• Imposibilidad de aumentar o disminuir el tono de la voz.

• Pérdida de agudos al cantar.

• Pérdida de volumen.

• Imposibilidad de modificar la voz.

 

Objetivos de un tratamiento foniátrico

• Habilitar a todo persona para el uso adecuado y funcional de la voz, ya sea hablada o cantada a partir de un trabajo de desarrollo consciente de la producción vocal.

• Rehabilitar a aquellas personas que padecen patologías de las cuerdas vocales, (nódulos, edemas, incompetencia glótica) reintegrando su voz a los parámetros normales, a través de diferentes ejercicios de respiración, relajación y colocación vocal.

• Informar acerca del funcionamiento del aparato fonador y de los cuidados para mantenerlo sano.

• Crear conciencia corporal vocal para evitar la reaparición de trastornos vocales.

• Entrenar a los profesionales de la voz, docentes, actores, locutores, vendedores, cantantes, a través de ejercicios adecuados para fortalecer la voz requerida para cada profesión. 

• Trabajar, articulacion, proyeccion de la voz,

 

 

La sesión

En la primer sesión se confecciona una ficha con la historia clínica y vocal del paciente y el comienzo de su disfonía para así determinar posibles causas o factores que determinaron su aparición. Se realiza una evaluación audioperceptual de la voz y una observación de las estructuras y sistemas que intervienen en su producción.  

Se trata que el paciente tome conciencia del problema y se le enseña un ejercicio ya sea de relajacion conciente, de respiracion, o de emisión para realizar en su casa.                         

 En las sesiones restantes se trabaja, conciencia corporal y vocal a partir de ejercicios de eutonía, relajación diferencial, yoga, streching, bioenergética, ejercicios de respiración, sensibilizacion sonora, agilidad y fortalecimiento vocal. A través de la lectura de poesías, textos, relatos. Vocalizaciones de voz cantada. Manejo de intensidad. Grito. Voz confidencial. 

 

El paciente y su participación activa

Su atención y participación  durante el tratamiento y entre las sesiones es esencial para su mejoría, y sobre todo, la práctica diaria de los ejercicios recomendados  y la toma de conciencia en relación a los síntomas y el origen de éstos para el comienzo de su curación.